Sorolla desde mi terraza Nada más traspasar el umbral de esta casa, me siento atraída hacia la luz que brilla al final del pasillo. Sigo ese resplandor y me encuentro con un cuadro espectacular, mientras me siento en una silla de la terraza, como hipnotizada. Veo toda la bahía. Es un cuadro perfecto que el próximo propietario de este precioso apartamento podrá disfrutar día tras día. Todo un privilegio. Y si le añadimos a este escenario la comodidad de encontrarnos entre el puerto y el pueblo de Jávea, a corta distancia a pie de ambos, creo que poco más se le puede pedir. Y, aún así, hay mucho más que sumarle a esta propiedad. Ven a descubrirlo. A tener en cuenta: el trastero se encuentra en la planta alta del edificio y dispone de ventana al exterior.