Arquitectura clásica con líneas rectas y el aspecto moderno que le proporcionan las columnas cuadradas y los amplios ventanales hasta el suelo que permiten tener vistas a la soleada piscina de la vivienda y a la zona exterior, toda de estilo minimalista. Los sobrios jardines requieren pocos cuidados y los muros y setos conforman una especie de marco invisible. Un grupo de pintorescas palmeras refuerzan aún más ese efecto. La villa impresiona por su marcada y dinámica decoración. Las luminosas habitaciones de amplias dimensiones proporcionan un toque de armoniosa modernidad, y la sofisticada planta ofrece además un discreto confort. Forman parte de dichas habitaciones los muebles empotrados de grandes dimensiones, como por ejemplo el vestidor. El equipamiento técnico, como el aire acondicionado o la calefacción por suelo radiante, así como un innovador equipamiento en la cocina es importante sin llegar a resultar excesivo. En el sótano, junto al garaje doble, hay un amplio espacio para practicar cualquier hobby, los juegos y el ocio. Está ubicada en un emplazamiento plano, soleado y tranquilo, a apenas diez minutos de la playa de arena de Jávea.